CEMENTERIOS CERRADOS: OTRA CARA DOLOROSA DEL CORONAVIRUS

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Desde que se decretó el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, el Cementerio de Devoto permanece cerrado. Los portones de acceso sólo se abren excepcionalmente, ante la necesidad de concretar un sepelio, y bajo estrictas medidas de seguridad.

La situación genera un daño sensible y profundo, en aquellas familias de la comunidad que sólo quieren poder volver a visitar a sus seres queridos.

Ante la reiteración de pedidos, la Municipalidad de Devoto, presentó una solicitud de apertura, frente al COE Central, que todavía no encontró respuesta positiva.

Mientras tanto, cada uno lleva esta situación, que agiganta la sensación de ausencia, como mejor puede.

No es fácil para nadie, e inclusive, según se presume, algunos en su desesperación violarían la cuarentena, para llegar a escondidas hasta el lugar.

Más dolor sobre el dolor

Cabe destacar que el aislamiento obligatorio y el coronavirus no sólo golpean duro a quienes desean honrar a sus muertos.

En una instancia aún más dramática, quienes fallecen en este particular momento sanitario no pueden ser velados más que por unas horas, con asistencia restringida y cuidados rigurosos. En ese contexto, el dolor de la despedida se agiganta.

Triste momento el actual, que profundiza heridas y lastima el alma.

Es otra cara para recordar, de los tiempos del coronavirus.

La imagen fue obtenida por el fotógrafo Hugo Jobet, uno de los “Escribas de la Cuarentena”.

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