LA PILETA DE GILI: SU HISTORIA

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Durante este fin de semana, en las redes sociales, se publicó, por primera vez, la historia de la mítica “pileta de Gili”. Lo hizo María Rosa Curtino, hija de uno de los fundadores de este emprendimiento, desinteresado y fraterno. Compartimos su escrito y también la invitación para que, quienes tengan anécdotas o datos para sumar, los den a conocer, comentando la publicación de la autoria, en Facebook.

LA PILETA DE GILI

Hace mucho tiempo que mi amiga Marta Ballarino, me sugirió que escribiese la historia de esta pileta, es decir, por qué fue construída allí y los hechos que en ella acontecieron  durante casi 70 años

 En el verano de 1951, un grupo de amigos: José Bainotti, Raúl Curtino (mi papá), Remo Paviolo, Renato Pellizetti, Ernesto Ballarino y hermanos, Carlos Bianciotti y creo que Ángel Paolaso, en algunas tardes calurosas se bañaban en un tanque de agua en un campo cercano al pueblo.

Un amigo del grupo, Esteban Gili, que vivía en un campo vecino con su esposa, padres y tres tíos solteros, les ofreció un lugar donde construir un tanque más grande.

Allí había agua dulce, clara y fresca como la de un manantial. El desagote sería en una laguna próxima al lugar

Pensaron :- Y si hacemos una pileta de natación ? Aceptado! Prepararon el terreno, consiguieron una bomba para extraer el agua, comenzaron a sacar la tierra con el albañil : el Gaucho Cagnotti y la construcción: Medidas: 17 metros de largo por 6 de ancho, con escaleritas en la parte baja y una profundidad de 1 a 3 metros  en la parte más profunda. Quedó hermosa.

Pintada color celeste y marcas de pintura roja en las “bajadas”. Renegaban con la bomba (Remo Paviolo perdió dos dedos por tocar la correa).

El primer verano fueron los hombres solos, al año después llevaron a los hijos y a las mujeres ( 1952 , 1953).

Se fueron agregando familias, casi todos parientes Me agradaría nombrarlos pero fueron tantas que no quiero olvidarme de algunas Se formó una gran familia que con una cuota mensual se obtenía dinero para el mantenimiento Se construyeron dos trampolines, un baño, depósito y lugar donde cambiarse de ropa. Aprendimos a nadar. Cada verano íbamos todos los días en moto, en bici o nos llevaba en auto algún papá (la protesta de siempre era que los vehículos volvían cubiertos de tierra) y a pasar despacio frente la casa de los dueños para no levantar tanto polvo Eran tan amables, gentiles y generosos Poco a poco se fueron para siempre. Normita, la hija de Esteban y su esposo Daniel Adés están a cargo del campo. Son personas excelentes que nos trataron con el mayor de los respetos y generosidad.

Cuando los padres de familia dejaban de concurrir al predio, pasaban sus “acciones” a sus hijos Hubo años que estaban asociadas más de 30 familias Se comían asados, se hacían chopeadas y grandes reuniones donde abundaba el mate Jugaban a las bochas, al vóley, al fútbol, a las cartas.

Se construyó un quincho y luego se amplió con todo lo necesario, entre otras cosas heladera y utensilios, bancos y mesas.

Maravilloso lugar para los niños rodeado de plantas y flores Se trabajó mucho, mujeres y hombres voluntariosos lo lograron

Pero las costumbres de la sociedad fueron cambiando en estos últimos años. Las familias jóvenes construyeron sus propias piletas y así disminuyó la cantidad de socios y por lo tanto el mantenimiento se hizo más difícil… Imposible  seguir yendo a ese lugar donde fuimos muy felices abuelos, padres, hijos y nietos…gracias a quienes tuvieron la hermosa idea de construirla

PILETA DE GILI HASTA SIEMPRE

María Rosa Curtino       Enero 27 de 2021

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