A cuidar las garrafas
Volvió el robo de garrafas. Tal vez se trate de una desagradable coincidencia, o de un operativo planificado. Lo cierto es que en 2 noches desaparecieron 3 garrafas. Y seguramente alguna otra de la que este medio no tiene registro.
En la noche del miércoles de la pasada semana se fue la primera mientras que la madrugada del jueves desaparecieron otras dos; una en el barrio de la laguna, las restantes en el sector sur. Y aunque la gente no haya formalizado la denuncia, el tema debe ser objeto de atención.
Ya en 2012 se dio un fenómeno generalizado de robo de garrafas, cuando el frío arreciaba y la colaboración de los vecinos permitió que la Policía se aproximara a los responsables del hecho lo que, mágicamente, sirvió para que la ola se apaciguara.
Habrá que ver que pasa ahora, aunque sería bueno advertir que si alguien roba garrafas es porque algún otro las compra. Ojalá ningún devotense “aproveche el negocio” y sí que estemos todos atentos para avisar a la Policía cuando vemos a alguien, sospechosamente de madrugada, paseando en bicicleta con una garrafa al hombro (así se vio en la madrugada del viernes, justito cuando desaparecieron dos garrafas).
No estaría de más prevenir, colocando a las garrafas algún elemento de identificación o un candado y cadena para perjudicar la labor de los amigos de lo ajeno.
