Santamarina eligió Devoto

Santamarina de Tandil transitó la previa al partido en la localidad de Devoto, alojándose en el Devoto Gran Hotel y entrenando en el predio del verde y blanco. Aunque la gente no los recibió con amabilidad, su estadía fue tranquila. Se observó un fuerte operativo de seguridad.

Cabe destacar que no sólo los jugadores tandilenses estuvieron en Devoto, también arribó el domingo por la mañana un grupo numeroso de hinchas que alentó con entusiasmo al equipo, haciéndose escuchar especialmente en el momento del abordaje del colectivo que los llevaría hacia la cancha en San Francisco.

Más tarde muchos de esos fanáticos siguieron el partido por TV en Devoto, sabiendo seguramente que no serían bien recibidos en San Francisco.

Durante toda la estadía de Santamarina se observó un fuerte operativo policial, que tuvo su pico máximo en el momento del traslado al Oscar Boero, cuando a los efectivos de consigna se le agregó el cuerpo de infantería de la Departamental San Justo.

Precisamente este fuere operativo de seguridad causó molestia entre los vecinos quienes se pronunciaron en contra de la “protección” y las “comodidades” brindadas al equipo, teniendo en cuenta la forma en que – a juicio de la gente- fue “maltratado” Sportivo cuando viajó a Tandil.

Ese malestar se hizo evidente en muchos silbidos, insultos y frases poco felices que la gente dirigió a lo largo del fin de semana al plantel bonaerense, cuando se ubicaba al frente del Hotel o, inclusive, cuando entrenó el sábado en el estadio Centenario.

Aunque a través de las redes sociales se había hecho una convocatoria para “molestar” en la madrugada e impedir que los tandilenses durmieran, finalmente nada ocurrió.