Otra versión de lo ocurrido en Roque VI

En el mediodía del sábado se presentó en FM CRISTAL Perla Perez, madre de los 4 hermanos involucrados en los disturbios en Roque VI  y Raúl Montiel, uno de los participantes del hecho. Ellos hicieron su descargo acusando al personal policial de supuesta persecución y malos tratos.

Según explicaron, Gonzalo Montiel, el mayor de los hermanos, presenta fractura de tabique, cortes en la cabeza, y golpes en el rostro y el cuerpo por los cuales tuvo que ser asistido en el Hospital Iturraspe, previo a su traslado a la Alcaidía de la Departamental San Justo.

Raúl reconoció que hicieron uso de la violencia pero atribuyó el origen del disturbio a los efectivos policiales. Su mamá por su parte señaló que denunciarán el hecho frente a la Jefatura de Policía de Córdoba, aportando como prueba filmaciones y fotografías de lo ocurrido. Raúl dice que fueron amenazados en dos oportunidades con el arma reglamentaria de uno de los policías.

Sin tomar partido en modo alguno y habiendo dado a conocer previamente la información oficial sobre el hecho, transcribimos a continuación textualmente el descargo y las acusaciones efectuadas por Raúl Montiel y su mamá Perla Perez.

“Hacía mucho que no salíamos juntos los 4 hermanos y toda la noche tuvimos 2 policías por detrás”.

“Termina el boliche y no salímos porque teníamos una jarra, vinieron 2 oficiales y nos decían vamos, nos pellizcaban de atrás y nos pechaban”.

“Le digo “pará”  ya que había más gente adentro no sólo nosotros”.

“Nos empezaron a pechar y uno de los oficiales saca las esposas y le pega a mi hermano más grande y le cortan la cabeza, ahí reaccionamos”.

“Se generó un despiole, sale toda la gente afuera y a mi hermano más grande lo esposan y le siguen pegando en el suelo. El quedó inconsciente, le rompieron el tabique y le cortaron la ceja, la cabeza, a mí me cortaron la cabeza, me quisieron esposar y me lastimaron toda la mano, salimos, uno de los oficiales saca el arma y nos apunta con el arma y estaba toda la gente mirando… Sacaron a toda la gente y mi hermano quedó adentro esposado toso roto y todos los policías del lado de adentro queriendo cerrar el portón”.

“Nosotros queríamos abrir el portón, a todo esto ellos en el espacio que tenían tiraban manos y te pegaban con las esposas, nosotros pegábamos también, pero siempre defendiéndonos. Cuando vuelve a sacar el arma nos calmamos todos”.

“Mi hijo estaba tirado en el suelo tapado en sangre, la desesperación mía era que lo sacaran pero no lo dejaban, lo cargaron en una camioneta de la policía y fuimos al Hospital donde lo curaron, lo cosieron, le hicieron placas, tenía cortes y golpes en la cabeza, nariz quebrada, muchos golpes en el cuerpo”.

“Tengo fotos y filmaciones más los estudios médicos de mi hijo y con eso voy a radicar una denuncia en la jefatura policial en Córdoba”.