Verónica Garello: Cuando las Relaciones Internacionales son una Pasión

Desde niña imaginaba un mundo cercano, de diálogo y encuentros. Hoy, una valiosa beca de la Universidad de San Andrés, hará realidad su sueño de estudiar relaciones internacionales en el mejor escenario.

Verónica Garello está a días nada más de instalarse en el campus de la Universidad de San Andrés para iniciar, muy lejos de su casa, el cursado de la Licenciatura en Relaciones Internacionales.

Lo hará en una de las casas de altos estudios más prestigiosa del país y como alumna becada; premio que le fue otorgado tras obtener uno de los puntajes más altos en el examen de ingreso.

Desde niña Verónica tuvo muy en claro su vocación por el mundo; a los 5 años ya diseñaba banderitas de distintos países con papel glasé. El modelo de Naciones Unidas y las Olimpíadas de Historia, en el nivel medio, terminaron de confirmar su pasión por la diplomacia.

Con apoyo docente y mucha decisión, Verónica eligió soñar. Visualizó su carrera en Buenos Aires y con mucho sacrificio cursó, en paralelo al último tramo del nivel secundario, el cursillo de ingreso on line de la Universidad de San Andrés.

El desafío se le presentó complejo, la obligó a exigirse notablemente en la preparación, le entregó alma y vida y, después de rendir el examen final, se dedicó simplemente a aguardar, muy ansiosa, pero segura de haber entregado todo.

La respuesta se hizo esperar un mes, pero superó toda expectativa; no sólo la Universidad la admitió sino que también, por su elevada calificación, resultó becada por lo que accederá a notables beneficios: no deberá pagar cuota ni matrícula; tendrá alojamiento sin cargo en el campus universitario, recibirá gratuitamente el almuerzo y, además, cobrará una mensualidad para sus gastos académicos (libros o apuntes).

Feliz, Verónica disfruta de todo lo que está viviendo. Desafió muchos prejuicios para sostener su vocación por una carrera que nadie le recomendaba, y todos los sucesos se encadenaron para su sueño se hiciera realidad.

Ahora, a días del inicio de sus estudios en Buenos Aires, Verónica analiza sus aspiraciones a futuro y tiene muy en claro que a ella le gusta mucho “la integración regional de Latinoamérica y la cooperación” porque considera que “son puntos muy importantes para sobrevivir en el mercado internacional de los próximos años”.

Volando con la imaginación –  y las cosas que le han ocurrido le dan alas para ello- Verónica afirma: “Tengo el sueño de poder sentarme en la ONU como siempre lo hice de manera ficticia; me gustaría mucho ser embajadora…. “

Con su vocación muy firme, Verónica reconoce que ésta es una experiencia única, que no desaprovechará; el 7 de marzo se inician las clases y una semana antes viajará para instalarse en su nuevo lugar en el mundo; el que siempre esperó.

Feliz y agradecida por lo que le está pasando, recomienda a todos los jóvenes ir detrás de sus sueños, “hacer lo que te dicta el corazón; en mi caso –reafirma- es una pasión que no podía controlar, una verdadera necesidad.. Siento miedo, tengo incertidumbre pero, al mismo tiempo, siento la necesidad de comerme el mundo”. Y allá va… FELICITACIONES!!!