EL JARDÍN FLORIT Y MIL GRULLAS POR LA PAZ

20

Quien pasa frente al Jardín Florit se sorprende con una verdadera postal de colores. Cientos de grullas se mecen al ritmo de la brisa, frente a la fachada de la institución. En total son 1117, y fueron confeccionadas por alumnos, docentes y familiares para conmemorar el Día Internacional de la Paz.

Las mil grullas de origami se convirtieron en un símbolo de la paz a nivel mundial,  a causa de la historia de Sadako Sasaki, una niña japonesa que deseaba curarse de su enfermedad producida por la radiación de la bomba atómica que cayó sobre Hiroshima.

Por consejo de una amiga y mientras estaba en el Hospital decidió que construiría mil grullas para que su deseo se cumpliera, según prometía una leyenda de su país. Ella pidió por su salud y por la paz en el mundo, pero no pudo cumplir su sueño porque murió cuando había llegada a las 664 grullas.

Sus amigos, en su honor terminaron de fabricarlas, convirtiéndolas en un verdadero símbolo del clamor por la paz, en el mundo.

La historia de las “Mil grullas de la paz” llegó al jardín de la mano de una de sus docentes, Claudia Beltramo, y fue tomada como propia por toda la comunidad educativa.

Docentes, niños y familiares, conocieron en detalle la historia, a través de relatos y videos y se pusieron a trabajar, con la ayuda de tutoriales, para lograr el objetivo.

Además, cada familia sumó a las grullas un “deseo de corazón”, que se colocó junto a ellas, frente al Jardín.

20 thoughts on “EL JARDÍN FLORIT Y MIL GRULLAS POR LA PAZ

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *